Las Palmas de Gran Canaria. Agencias. La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) ha denunciado que la situación que se generó este martes al facilitar la salida de Arguineguín a un grupo de inmigrantes sin un lugar a donde dejó «en total desamparo» a esas personas e hizo evidente «la descoordinación de los Ministerios”.
«Necesitamos que los ministerios se coordinen perfectamente para poder afrontar la situación de Canarias», ha manifestado uno de los portavoces de CEAR en las islas, Txema Santana, que advierte de que episodios como el de anoche «no generan ninguna certidumbre».
La Policía facilitó este martes que salieran del campamento de Arguineguín 227 inmigrantes marroquíes, con el argumento de que ya habían cumplido el plazo máximo de retención de 72 horas que fija la ley. Pero como se les había asignado ningún recurso de acogida, acabaron en la calle, ante la Delegación del Gobierno.
La situación cogió por sorpresa a varias administraciones, entre ellas al Gobierno canario, cuyo presidente, Ángel Víctor Torres (PSOE), ha pedido explicaciones a Interior y al propio Ministerio de Inclusión Social y Migraciones, que tuvo que contratar apresuradamente plazas en un complejo hotelero de Maspalomas para que nadie durmiera anoche en la calle.
Para CEAR, con más de 17.000 inmigrantes llegados a Canarias en lo que va de año, la mitad en los últimos 30 días, resulta imprescindible que se activen las derivaciones, «el traslado directo al territorio continental», porque la situación en esta comunidad autónoma «no se puede gestionar con carácter insular».
Y las derivaciones, subraya Santana, se tienen que «publicitar de forma explícita y clara a la sociedad canaria».
La crisis migratoria, advierte CEAR Canarias, «lleva al alza un año y tres meses» y «ni empieza ni acaba hoy».
